Como descosquillar a perros y gatos

13/11/2023

Hola  a todo el mundo ¿Qué tal? Espero que estéis pasando una buena semana.

Hoy voy a continuar hablando sobre cosas a las que es fundamental acostumbrar a perros y gatos.

Ya que muchas veces nos encontramos en la clínica con animales que no están acostumbrados a que se les toque, especialmente ciertas zonas o que no toleran que se les sujete de cierta forma.

Algunos simplemente se asustan, pudiendo llegar a congelarse, otros incluso pueden llegar a atacarnos a los veterinarios o incluso a los propietarios, en caso de que entren en pánico.

Para que este tipo de experiencias no sean tan traumáticas, os voy a dar una serie de consejos para que esto no lleven tan mal. 

Porque yo creo que a nadie le gusta que su animal lo pase mal en el veterinario, que además será inevitable si queremos que se mantenga sano. Además si aplicamos esto también nos podemos evitar disgustos por ejemplo en caso de que alguna vez tengamos niños en casa (aunque como ya he mencionado en muchas otras ocasiones, no debemos dejar juntos a animales y niños sin supervisión)

¿y cuál es la causa de esto?

Nos preguntan muchas veces, pues es sencillo, no están acostumbrados y por eso tienen miedo. Si a eso añadimos que le acercamos cosas que no saben lo que son o para que sirven, tenemos la combinación perfecta para un animal asustado.

Pero aunque esta reacción sea natural os equivocáis si pensáis que esto es inevitable.

Este tipo de reacciones de asustarse es habitual en todas las especies animales.

Esto ocurre, porque, si nos fijamos en lo que ocurre en la naturaleza los animales no suelen tener contacto físico con otros animales salvo en caso de situaciones concretas, y aun en estos casos suelen ser con individuos con los que ya tienen un vinculo.

Por eso un gato tolera mucho mejor que lo toque su dueño, a que lo toque un veterinario que no conoce de nada.

Por eso en algunos animales domésticos que por su tamaño y fuerza es necesario manipular en ocasiones y necesitamos de su colaboración se recurre a lo que algunos llaman “descosquillado”.

Animales que son presas como los caballos, tienen tendencia a asustarse fácilmente. EN el caso de los animales son consideradas como exóticas, las reacciones cuando se asustan pueden ser todavía más exageradas, lo que supone un riesgo para ellos y para las personas que traten de hacer algo, incluso ayudarlas.

Esta palabra normalmente se usa en grandes animales, especialmente en los caballos. Ya que si se asustan fácilmente cuando alguien les toca o se les acerca pueden causar lesiones graves a causa de un mordisco o una patada.

Por eso se recurre al descoquillado. Este proceso consiste en tocar repetidas veces toda la superficie del animal dando largas caricias, de forma que detectemos en partes del animal tiene “cosquillas” es decir que retira el miembro o muestra cierta reticencia a ser tocado.

Una vez se detecta una de estas zonas se repite el proceso hasta que el animal no muestra reacción alguna, es decir que ya no se asusta porque le toquemos en una zona sensible o que simplemente no les suelen tocar.

Básicamente se basa en el que el animal se acostumbre a ser tocado e incluso inmovilizado en ciertas posiciones. De este modo evitamos posibles situaciones peligrosas, tanto para los que puedan estar sujetándolo como para el animal, ya que si se resiste con mucha fuerza puede que se llegue a hacer daño.

El proceso se puede realizar no solo con las manos, sino con otros instrumentos, como por ejemplo, con cuerdas.

Hay personas que incluso utilizan plásticos colocados al final de un palo, ya que el animal se acostumbre también a diferentes texturas y a que las cosas que se le acerquen pueden hacer ruido.

Independientemente de cómo lo hagan, el objetivo es que e animal deje de reaccionar al ser tocado.

La pregunta es ¿se puede hacer eso con perros y gatos?

En el caso de los perros y gatos por cuestiones de practicidad en la mayor parte de los casos se realiza el proceso de forma inconsciente con las manos al acariciar al animal, en la mayor parte de los casos sin que haya reacciones negativas por su parte.

Sin embargo nos solemos olvidar de tocar y manipular ciertas partes, como son las patas, las orejas o la boca, por mencionar algunas de las que se suele dejar la gente cuando acaricia a su mascota.

COMO LO HAGO

Algunas de las zonas que menos les gusta que les toquen a los perros y gatos, son. Ten en cuenta que estas zonas pueden variar según la especie y animal:

  • Las orejas
  • La boca
  • La cola
  • Las patas en toda su longitud tanto las delanteras como las traseras
  • El abdomen

Por eso te aconsejo que al menos una vez al día, te dediques a acariciar y masajear a tu peludo, alternando zonas que le gustan con otras que no le gustan tanto como las mencionadas, así ira perdiendo sensibilidad en estas zonas.

También es útil que hagas pequeños movimientos, e irlos incrementando progresivamente, para que se acostumbre a ciertas acciones, como que alguien le abra la boca.

Si notas que el animal esta incomodo, para y vuelve a intentarlo otro día. Recuerda que siempre me puedes consultar a mi u otro profesional.

Recuerda respetar sus tiempos y si notas que tu pequeño se agobia con ciertos movimientos porque no los ha hecho nunca o porque le tocas en ciertas zonas y no le resulta agradable, siempre puedes añadir algo que le guste a la ecuación, como darle lata o semejante, puede que sea suficiente para que cambie de opinión en unos días y pase a ser algo que te pida.

El proceso no se debe de realizarse una vez y ya está, lo ideal es en un principio, incluso puedes usar el refuerzo positivo para que se esté quieto más rápido, dándole de comer o acariciándolo después en zonas que disfrute especialmente.

Aconsejo repetirlo durante varios días seguidos durante algunas semanas y después de forma aleatoria.

Este proceso sera más sencillo y fácil tanto para el animal como para nosotros si empezamos cuando es pequeño, ya que si bien son más nerviosos también tienen mucho menos miedo a las cosas nuevas.

Si además tu pequeño es de los que desconfía de los extraños, ellos pueden trabajar con el en que se deje acariciar.

Si en algún momento ves que tiene alguna dificultad te sugiero que contactes conmigo u otro profesional para que te ayude.

CUANDO HACERLO

Siempre es más fácil si empezamos a hacer este tipo de cosas cuando son pequeños, pero no quiere decir que no se pueda empezar a hacer cuando el animal es adulto. Cualquier edad es buena para empezar.

Recuerda que debes de repetir estos procesos durante toda la vida del animal, conviértelo en parte de un masaje rutinario para el, de manera que siempre se deje tocar en todos sitios y lo asocie a algo positivo. El momento de antes de irse a dormir es perfecto para esto.

Coméntame en comentarios que te ha parecido el articulo y si ya lo estás haciendo con tu pequeño. Cualquier duda no dudes en contactar conmigo

Gracias por llegar hasta aquí, ¡espero que te haya resultado útil!

En caso de cualquier duda, pregunta o sugerencia, ¡escríbeme en comentarios! Nos leemos en las próximas publicaciones.

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